El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este martes un nuevo acuerdo comercial con China que marca un giro significativo en las relaciones bilaterales. El pacto incluye la reanudación del ingreso de estudiantes chinos a universidades estadounidenses y el desbloqueo por parte de Pekín de las exportaciones de tierras raras e imanes estratégicos, fundamentales para industrias clave en EE. UU.
¿Qué incluye el acuerdo bilateral entre ambas potencias?
Como parte del acuerdo, Estados Unidos mantendrá aranceles del 55% sobre las importaciones chinas, una medida que combina tarifas implementadas Enel primer periodo presidencial de Trump con nuevas penalizaciones por la crisis del fentanilo. A cambio, China aplicará un arancel del 10 % a bienes estadounidenses.
Una de las principales concesiones chinas fue liberar el suministro de tierras raras e imanes, materiales esenciales para la fabricación de chips, armas de alta tecnología, automóviles eléctricos y turbinas eólicas.
El secretario de Comercio de EE. UU., Howard Lutnick, afirmó que el compromiso de entrega “por adelantado” disipa las restricciones que habían tensado las cadenas de suministro globales desde 2023.
En un gesto que apunta a aliviar tensiones diplomáticas, Washington permitirá nuevamente el ingreso de estudiantes universitarios chinos. La medida revierte parcialmente las políticas restrictivas implementadas a partir de 2021, y podría beneficiar a más de 200 mil estudiantes en los próximos años, según estimaciones del Instituto de Educación Internacional.
Aunque el marco general fue definido, el acuerdo requiere la aprobación formal tanto de Trump como del presidente chino, Xi Jinping. No obstante, las conversaciones se reanudaron en Londres luego del fracaso de una ronda previa en Ginebra, cuando China limitó abruptamente sus exportaciones de materiales estratégicos.
El calendario prevé que los detalles del acuerdo se cierren antes del 10 de agosto, fecha límite acordada en las conversaciones de Ginebra. Mientras tanto, la Casa Blanca aseguró que las restricciones a la exportación de tecnología sensible, como chips avanzados, permanecerán intactas.
Reacción del mercado
Pese al anuncio, y la expectativa que un acuerdo comercial entre China y Estados Unidos había generado, los mercados bursátiles reaccionaron con cautela. El índice S&P 500 subió apenas un 0.1 %, reflejando la incertidumbre que existe en la comunidad internacional sobre si realmente se implementará el acuerdo.
Y esto se debe a que las políticas arancelarias cambiantes impulsadas por Donald Trump han generado una fuerte inestabilidad en los mercados globales, provocado cuellos de botella y desorden en los principales puertos internacionales, y representado para las empresas pérdidas millonarias en ventas, así como un aumento considerable en sus costos operativos. Analistas destacan que, si bien se trata de un avance diplomático, los efectos concretos en la economía podrían tardar meses en materializarse.