Si bien el maltrato animal siempre ha existido, desde hace unos meses hemos sido testigos de que esta terrible situación va en aumento. Rescatistas, asociaciones civiles e instituciones gubernamentales se han visto completamente saturados tanto en número de rescatados como en gastos.
El maltrato animal es un problema social, es decir, es un problema que necesita de todos, sociedad, instituciones, gobernantes y autoridades somos parte del problema cuando deberíamos ser parte de la solución.
Hace unos días leía una frase que dice "Los perros no son de la calle, llegaron ahí por irresponsabilidad de muchos, mismos que luego se quejan del problema sin ofrecer algún tipo de solución".
Eri de Amor Sin Raza me dijo el día de ayer "un rescate no es exitoso, hasta que el animalito esta feliz y seguro en un hogar para siempre" y me dio la idea perfecta para este artículo.
Existen muchas maneras de hacer rescates, yo no soy quien para juzgar el trabajo de otras personas y decirles si lo que hacen está bien o mal ya que todas las personas que nos dedicamos a esto nos encontramos en constante aprendizaje y solemos cometer errores, sin embargo, entre varias y varios valientes rescatistas hemos creado junto a una servidora una guía simple con la esperanza de dar claridad y de facilitar un ejercicio de por sí complicado y lo hemos resumido en los siguientes pasos:
Es importante mencionar que no todos los animalitos lo logran, muchas veces el maltrato y abandono han sido tan grandes que su cuerpo ya no aguanta, pero un rescate puede ayudarles a tener un final digno y sin dolor.
Muchos de ellos han sido tan maltratados que atacan por miedo, hay que tener claro que esto no es su culpa, ellos no actúan con maldad, este tipo de labores nos enseñan a tener paciencia, la mayoría de ellos pasan por un proceso muy duro en donde tienen que aprender a confiar nuevamente, ellos por instinto no se rigen bajo nuestras leyes ni lo que creemos que es correcto o incorrecto, pero ese será tema para otro artículo, lo importante siempre es tener paciencia, mucho amor y respeto por el animal qué estas rescatando.
No existe mejor sentimiento que ver como transformas la vida de ese animal, como pasan de estar de una situación precaria a verlos tener la vida que siempre merecieron en su hogar para siempre. No necesitan salvar miles, con salvar uno de manera responsable ya hicieron de este planeta un mundo mejor.
Recuerden siempre que esta labor siempre es mejor en equipo, unidos hacemos más y juntos podemos cambiar al mundo un perrito a la vez.