El Gobierno de la India se adjudicó el ataque sucedido el pasado 7 de mayo en Pakistán, mismo que dejó al menos 31 víctimas mortales y 57 heridos en dicho país, así como en la región de Cachemira que se encuentra bajo control pakistaní.
Estas acciones fueron una respuesta al ataque encabezado, el pasado 26 de abril, por el grupo autodenominado “Resistencia de Cachemira”, en el que murieron 26 personas de la región de Cachemira administrada por la India. Tras los mortíferos sucesos, el Gobierno indio culpó a Pakistán de respaldar el ataque de dicho grupo, al cual también han señalado por su presunta relación con una organización terrorista.
Sin embargo, ambos hechos son sólo algunos de los más recientes de una larga historia de tensiones que se remontan a finales de la década de los 40. Cuando India se independizó de Reino Unido en 1947, se llegó al acuerdo de dividir el territorio en dos naciones de acuerdo con sus religiones, así, la población mayoritariamente musulmana construyó el Estado de Pakistán.
La excepción de dicho consenso fue Cachemira, un territorio que actualmente se encuentra dividido en tres regiones administradas por tres países: China, India y Pakistán. Desde hace décadas, los últimos dos sostienen una disputa por el control del territorio.
Al respecto, el Gobierno de México, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SER), reiteró su “profunda preocupación por la escalada de tensiones” entre dichas naciones. Asimismo, destacó la postura de la presidenta Claudia Sheinbaum, quien ha señalado que México siempre apostará por la paz y la fraternidad en el mundo.