Desde el Monumento a la Patria en el Bosque de Chapultepec, el Gobierno de la Ciudad de México encabezó este 14 de noviembre la ceremonia de entrega de la insignia Yaotl (que significa ‘guerrero’, en náhuatl), en reconocimiento a acciones heroicas de distintos cuerpos de emergencia durante los eventos de las fuertes lluvias y el incidente del Puente de la Concordia.
Elementos de la policía capitalina, bomberos y personal de urgencias médicas recibieron la distinción por su labor durante el incidente del Puente de La Concordia, ocurrido el pasado 10 de septiembre, así como por su participación en la atención a las recientes lluvias que afectaron a cinco entidades el 9 de octubre. Durante el acto se recordó que la ciudad fue la primera en formar brigadas y centros de acopio para apoyar a las familias damnificadas.
En su mensaje, la jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, reconoció la labor de las instituciones públicas federales y locales por su valentía: “Cada insignia encierra una historia de entrega, esfuerzo y compromiso. Este reconocimiento no solo honra su valentía, sino que representa un compromiso permanente para construir una ciudad más humana, segura y solidaria”, afirmó.
El evento también rindió homenaje a quienes han enfrentado momentos críticos en la historia de la capital, desde el sismo de 1985 hasta tragedias recientes, como la muerte de 31 personas en el accidente del Puente de La Concordia. Destacó el caso de Alicia Matías Teodoro, reconocida por proteger a su nieta durante el colapso; se anunció que recibirá una medalla póstuma.
Asimismo, se destacó el operativo “Tlaloque 2025”, implementado para la temporada de lluvias, cuyas brigadas han trabajado día y noche en desazolve, atención médica, asistencia social y operación de comedores comunitarios en zonas afectadas.
La entrega simbólica de insignias incluyó a personal de Obras y Servicios, Gestión de Riesgos, Protección Civil, Bomberos, Seguridad Ciudadana, Bienestar, Salud, Medio Ambiente y la Fiscalía, entre otras dependencias.
El mensaje central fue para quienes trabajan directamente en el territorio, muchas veces fuera de horario, “dejando atrás sus propias preocupaciones para salvar vidas”, se destacó. La ceremonia finalizó con un minuto de silencio en memoria de las víctimas de ambos sucesos