El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), António Guterres, informó que la cifra de personal que ha perdido la vida en cumplimiento de su deber alcanzó el pico más alto de su historia, con 168 muertes, de las cuales, 126 ocurrieron en la Franja de Gaza.
“No aceptaremos que el asesinato de civiles, trabajadores humanitarios, periodistas, personal médico o personal de Naciones Unidas se convierta en la nueva normalidad en ningún lugar ni bajo ninguna circunstancia”, declaró Guterres, durante el homenaje anual a los trabajadores de la ONU fallecidos en servicio.
El secretario detalló que 2024 fue “especialmente devastador en Gaza”, en donde uno de cada 50 empleados de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA) fue asesinado, en el contexto de la ofensiva militar israelí en la región, que ha cobrado más de 50 mil víctimas desde octubre de 2023.
“Los hombres y mujeres a quienes honramos hoy no eran sólo nombres en una lista, eran individuos extraordinarios, cada uno con una historia de coraje, compasión y servicio. Estaban impulsados por la búsqueda de la paz, por la urgencia de aliviar el sufrimiento humano y por la convicción de que toda persona en el mundo merece dignidad y protección”, aseguró el diplomático.
Asimismo, Guterres señaló que se debe reconocer no sólo a quienes perdieron la vida en el cumplimiento de su deber, sino también a quienes continúan trabajando en la ONU alrededor del mundo. Sin embargo, aclaró que “ellos no buscan reconocimiento, ellos buscan hacer una diferencia”. “Su coraje nos conmueve y su resiliencia nos inspira”, expresó a las y los colaboradores de la ONU en zonas de crisis.
Respecto a la situación en Gaza, Guterres reiteró la urgencia de un alto el fuego permanente, así como de liberar a todos los rehenes y permitir la entrada ilimitada de ayuda humanitaria.