"MAGA está muerto": la fractura del movimiento que llevó a Trump al poder se profundiza tras revelaciones del caso Epstein

"MAGA está muerto". Con esa contundente frase en ‘X’, el líder de extrema derecha Nick Fuentes declaró el miércoles 12 de noviembre el fin del movimiento que llevó a Donald Trump al poder.

La declaración coincide con la revelación de nuevos correos electrónicos del caso Epstein que mencionan a Donald Trump, y que han provocado reacciones encontradas dentro de la derecha estadounidense, evidenciando una fractura que parece irreparable.

El movimiento "Make America Great Again" (MAGA) no es un bloque monolítico, sino una coalición de facciones de la derecha. Se trata de un movimiento social nacionalista y populista con raíces en Pat Buchanan, quien compitió por la nominación presidencial republicana en 1992 y 1996 con ideas sobre proteccionismo, antiglobalización y un muro fronterizo, sintetizadas en el lema "America First". Además, MAGA es heredero de la ira populista que impulsó al Tea Party en 2009, tras el rescate bancario posterior a la crisis financiera de 2008.

A partir de 2015, con la ayuda de Steve Bannon, director de Breitbart, Trump logró conjuntar esas fuerzas marginales de la derecha para construir una coalición mayoritaria del Partido Republicano. Esta incluía al "Alt-Right", un movimiento de nacionalismo blanco y antisemitismo liderado por Richard Spencer; a los anti-establishment, representados por figuras mediáticas como Sean Hannity y Alex Jones; y a los evangélicos, con el respaldo clave de Jerry Falwell Jr., entonces presidente de la Universidad Liberty.

A partir de ese momento, MAGA sufrió un proceso de evolución, la camada de 2015-2016, la de los "insurgentes", fue gradualmente sustituida por la camada actual de "ideólogos" y "profesionales".

En 2017, Richard Spencer y el término "Alt-Right" se volvieron políticamente radioactivos tras la manifestación "Unite the Right" en Charlottesville. Los cánticos nazis y la violencia, que resultó en la muerte de una persona, hicieron insostenible su figura. Su lugar fue ocupado por Nick Fuentes, líder del movimiento "Groyper". Fuentes representa un "rebranding" del nacionalismo blanco de Spencer enfocado en la Generación Z. Los Groypers acusan al establishment de traicionar el "America First" y son conocidos por infiltrarse en eventos conservadores, como los de TPUSA, para confrontarlos.

Para 2018, Alex Jones perdió su megáfono; sus teorías de conspiración sobre la masacre de Sandy Hook provocaron su expulsión de todas las plataformas principales. Mientras tanto, Sean Hannity fue eclipsado por Tucker Carlson. Durante su paso por Fox News, Carlson se convirtió en el principal ideólogo del movimiento, tomó las ideas "America First" de Buchanan y las anti-establishment de Jones, eliminó las conspiraciones menos sostenibles y presentó una narrativa elocuente que dio congruencia a la ideología MAGA.

En 2020, Falwell Jr. fue forzado a renunciar a la presidencia de la Universidad Liberty tras una serie de escándalos personales. Su relevo fue Charlie Kirk con Turning Point USA (TPUSA). Kirk organizó a la juventud "anti-woke", se enfocó en los campus universitarios y construyó la infraestructura del movimiento. Según reportes de Forbes, para 2023, la red de organizaciones afiliadas a TPUSA había recaudado un total de 389 millones de dólares desde 2016.

Sin embargo, desde que Donald Trump volvió a la Casa Blanca en enero de 2025, dos temas han fragmentado por completo al movimiento: el apoyo a Israel y el manejo del caso Epstein.

El "MAGA Institucional", representado por TPUSA, ahora encabezado por la viuda de Charlie Kirk, Erika Kirk, y la Casa Blanca, mantiene una lealtad absoluta a Trump. Su reacción a los correos de Epstein fue defender al presidente y denunciar una "cacería de brujas".

El "Populismo Aislacionista", encabezado por Tucker Carlson, ha demostrado que su prioridad no es la persona de Trump, sino la agenda "America First". Esto incluye un profundo escepticismo sobre el apoyo a Israel y una narrativa anti-establishment. Sobre los archivos de Epstein, figuras de esta corriente, como la periodista Megyn Kelly, han criticado a la administración por su falta de transparencia, calificando la situación como una "herida autoinfligida" por no haber publicado los archivos antes.

Mientras que la "Extrema Derecha Radical", liderada por Nick Fuentes, ve al "MAGA Institucional" como "vendidos" a intereses pro-Israel. Esta facción usa los correos de Epstein como la "prueba final" de que Trump es un "farsante" que nunca tuvo intención de "drenar el pantano" y que es parte de la misma élite que prometió combatir.

Donald Trump camina hacia el fin de su primer año de gobierno sin una base social unificada. Con facciones clave declarando la "muerte" de MAGA y con el capital electoral que lo llevó dos veces a la Casa Blanca escurriéndosele entre las manos.