Los dos proyectos, las dos realidades en juego

En días pasados hemos visto las últimas estrategias que la oposición moralmente derrotada ha echado a andar para tratar de descarrilar a la Cuarta Transformación. 

Videos de un supuesto cómico, ambientalista, político y actor de quinta (que sin el dinero del gobierno no es más que uno de tantos) videos que trajeron como resultado que más y más personas dejaran de apoyar a la Candidata X y confirmar que la Oligarquía Corrupta sigue suplicando por no desaparecer. 

Conferencias de Claudio X donde demuestra que para él lo correctamente moral, se traduce en hacer fraudes, condenar al Pueblo a la miseria, en obtener pensiones de forma fraudulenta, siempre y cuando los que se beneficien de ello sea la Oligarquía Corrupta. 

Encuestas que no reflejan la realidad del país, utilizadas por la Candidata X, como muestra de su victoria. Encuesta que los propios banqueros desmintieron, dejando claro que la Candidata X es una mitómana y una persona que no pudo tener un acierto en toda la campaña. 

Mientras pasa esto, el Pueblo se prepara para llenar las urnas desde muy temprano, pues aún y con toda la guerra sucia no han podido quitarle a la 4T, al Presidente Andrés Manuel López Obrador, un solo punto porcentual respecto a su aprobación; y ni qué decir de la Candidata Claudia Sheinbaum que sigue en su carrera solitaria sin que nadie le haga sombra, caminando firme y sin preocupaciones.

Pero mucho se ha hablado de dos proyectos que están en juego este 2 de junio, dos proyectos, dos futuros, dos realidades. 

El primero, es aquel, de las matanzas, las persecuciones, de las guerras, de anteponer los intereses de unos cuantos sobre los del Pueblo, de buscar que todos los recursos del país sean entregados a particulares, pero no solo a particulares sino a particulares extranjeros; es aquel que señala que la pobreza es una condición de la que nadie puede salir de ella; donde solo los millonarios y no todos, sino solo los que obtienen sus riquezas con fraudes y  corrupción, son los que cuentan, los que existen, los que tiene derechos, los que pueden tener justicia, los que pueden y deben tener más y más; aquel donde escoger a quienes pueden tener acceso a programas sociales, está bien; aquel donde la educación sea solo para los que puedan pagarla; aquel país solo para unos cuantos, y los demás solo son vistos como una mercancía, como una herramienta para que los de arriba tenga más y más beneficios; aquel proyecto que no busca que la mano de obra mexicana sea calificada, sino que sea mano de obra barata, con un salario de muerte, sin educación y sin preparación; aquel donde el agua se privatice, donde no exista obra pública, donde no haya proyecto de nada, solo hacer personas sin preparación para ser peones mal pagados; aquel donde solo unos cuantos pueden tener pensiones millonarias, y los demás una miseria; donde el gobierno pague grandes cantidades de seguros médicos particulares a unos cuantos, incluso para sus cirugías estéticas, y los demás con un seguro popular y atención a medias, porque los insumos también están privatizados, y los ciudadanos, tienen acceso a la salud con un programa totalmente incapaz de atender a millones de mexicanos, donde los hospitales son abandonados por décadas, y los pocos que están en operación no tienen equipo médico; aquel donde no haya médicos, enfermeros , maestros, nada, nada. 

El segundo, por el contrario, se basa en revertir la desigualdad social, donde hoy los privilegios son eliminados y los derechos son para todos; donde los programas sociales son universales, es decir, sin importar los estratos sociales, todos tienen derecho a ellos; donde las leyes están pensadas para el beneficio de todo el pueblo, no de unos cuantos; es aquel proyecto donde el pueblo es el que determina en qué se va a gastar el presupuesto; donde las obras públicas están pensadas en beneficiar a todos, por igual, y de paso, generar empleos bien pagados para todos; aquel proyecto en donde la educación es un derecho, la salud es un derecho, el agua es un derecho, la luz o energía eléctrica es un derecho y los recursos naturales son explotados en beneficio del pueblo; donde el presupuesto se conforma en razón de darle beneficios, derechos a todo el pueblo; aquel en el que el pueblo tiene que y en qué gastar; el proyecto en el que no es necesario crear nuevos impuestos o aumentar los mismos que ya existen, sino sólo combatir la corrupción para que alcance el erario en beneficio de todos.

Esos son los proyectos que están en juego, el primero de la Oligarquía Corrupta, el segundo, del pueblo de México, ese pueblo que hoy tiene la oportunidad de seguir sembrando y cosechando derechos, beneficios, justicia social y un futuro mejor. 

Todo ello se resume en que un proyecto busca recuperar y consolidar los privilegios de la oligarquía corrupta, mientras el otro busca construir y consolidar los derechos de todos. 

Hoy los mexicanos decidiremos si regresa la Oligarquía Corrupta o la Cuarta Transformación continúa en beneficio de todos. 

A votar todos, que no quede duda de los resultados, que no haya pretexto, que todo quede claro.