“El trabajo más productivo es el que sale de las manos de un hombre contento.”
Víctor Pauchet.
Hace unas semanas iniciábamos la primera de tres entregas sobre un análisis de la situación laboral y qué esperar de ello en la juventud sinaloense, hoy es tiempo de cerrar esta trilogía. Me era difícil iniciar esta tercera entrega después de recibir tanta información que desnuda una lacerante realidad no solo local, si no global y como ese arraigo de más de 30 años sentó el precedente para una triste realidad, la precariedad laboral se da en nuestro país y se contagia cada vez más rápido, la clase empresarial supo cómo explotar la necesidad de la reactivación económica de parte del gobierno y por otro lado supo cómo explotar la necesidad de los mexicanos, y como buenos empresarios conservadores, sin escrúpulos, lucran con la fuerza de trabajo para acumular más riqueza, y es que se entiende que en pleno siglo XXI en México el rico es más rico no necesariamente por innovar y hacer felices a los trabajadores, si no por sus prácticas arraigadas y perfeccionadas para evadir impuestos y exprimir la jornada laboral si es que esta aún existe como tal.
Antes de escribir esta columna presenciaba la presentación del libro “prisionero del sistema” de Rafael Méndez Valenzuela, un joven que en búsqueda de su sueño y en la búsqueda de un trabajo fue víctima del estado y pasó más de una década preso por un sistema corrupto que privilegia a todos menos a quien debe. En el libro, Rafael narra toda su experiencia a lo largo de estos años y el papel que juega su valiente madre Judith, a quién le envío un gran abrazo y todo el reconocimiento a la lucha que sigue dando.
Así como Rafael, ¿cuántas mexicanas y mexicanos no estarán presos en el mejor de los casos?, su delito, la necesidad, el hambre de crecer, el encontrar su camino y a su paso el abuso, la corrupción y la explotación. Existe mucho que hablar al respecto, sin embargo, esta semana me día a la tarea de recuperar algunos testimonios y también de preguntar en las redes sociales, cuánto ganan hoy las personas y en qué condiciones laborales viven y si les es necesario buscar otras entradas de dinero para sacar adelante su vida cotidiana, y esto fue lo que encontramos:
Iniciamos enterándonos que en el sector publico aun sin gozar de todas las prestaciones existen sueldos dependiendo el cargo y la institución desde $5,300 pesos mensuales por ser auxiliar, en uno de estos casos la persona cuenta con licenciatura y al mismo tiempo tiene que dedicarse fuera de horario laboral a las “ventas por Internet” para solventar los gastos. Sin embargo, tenemos otros ejemplos, de jóvenes que iniciaron su vida laboral con jornadas de trabajo de hasta 12 horas como vendedor en una cadena de zapaterías en las cuales tenía un ingreso mensual de $3,000 pesos, he incluso con licenciatura y en una empresa de gran arraigo dedicada a informar a la entidad, su sueldo no rebasaba los 3000 mensuales y bajo un esquema de sub contratación. Pero también existen los casos de éxito, los llamados “garbanzos de a libra” de los que hablaba Gerardo Matus, esos que, para justificar el abuso y la explotación, se deben permitir tener un caso de éxito para que en un ánimo aspiracionista, todas y todos den más de sí para lograrlo, casos como el de profesionistas que por su labor y empeño llegan a ganar por encima de 50,000 pesos para un banco de arraigo nacional o empleados de la salud que con especialidad como el caso que nos contactó dijera ganar 20,000 mensuales, con gran gusto me dio el saber que entre los que nos facilitaron su información y no daremos nombres, puedan tener el privilegio de ser ese “garbanzo” y puedan cumplir un poco más sus expectativas, por desgracia en otro de los sentidos que consulte, preguntaba si tenían que llevar a cabo otras actividades (no fiscalizadas) para llegar a su meta financiera o al menos no pasarla tan mal, y va desde la madre soltera que vende artículos de defensa, quien trabaja de niñera o vendiendo a través de redes sociales, actividades que sin duda ganan auge al facilitar el ingreso de recursos y que no sufre tanto el impacto por el pago de impuestos.
Ante estos datos, que aun debo procesar puedo afirmarles que la precariedad laboral está más vigente que nunca y nos acercamos cada vez más a una situación de esclavitud de siglo XXI donde o nos explotan o nos auto explotamos y donde realmente la competencia no es leal, ¡no existe! Donde el nivel de estudios no asegura un salario digno, donde una empresa de “prestigio” no es garantía de seguridad y donde el empresario conservador se jacta de ser el bueno por decir que tiene 30 mil vacantes en Sinaloa y es “el y la joven, sobre todo, el que no quiere trabajar” ¡No existe mayor farsa que esa! Mientras tanto existen programas de parte de gobierno federal donde se contratan a becarios para capacitarse durante un año y contrasta que un programa de becarios este saturado y que cada vez más empresas lo contraten o lo busquen contratar para no pagar un año a sus becarios y que los pague el estado, mientras por otro lado se golpee diciendo que son programas para flojos y que no deberían existir, que los jóvenes se meten a eso para no trabajar, y solo cobrar la beca/pago.
Por una no deben llevarla todos, que más de uno existirá. Quiero hacer un paréntesis para contarles que también se habla de la fuga de cerebros o talentos a empresas foráneas, como no lo habría si una empresa holandesa dedicada al campo paga más de 30 mil pesos mensuales en un área de atención a clientes mientras que en una empresa tradicional sinaloense dedicada también a la agroindustria en el norte, el sueldo apenas rebasa los 10 mil pesos mensuales, así que como no recordar la frase de inicio, donde se habla de la felicidad del trabajador y claro un trabajador contento con un buen sueldo y prestaciones es claro que hará un mejor papel en su labor!
Llegamos a la conclusión que el factor pandemia sumado a la política económica nacional de los últimos 30 años y las practicas arraigadas de los empresarios conservadores, nos llevan a un ambiente inhóspito y poco esperanzador para las y los miles de solicitantes de empleo, sobre todo aquellas y aquellos en edades plenas y sobre todo con la necesidad de aventurarse en la búsqueda de la auto suficiencia, y es que hoy más que nunca es necesaria la intervención de las autoridades aún más profundamente para darle certeza a la sociedad en general, a la que produce, a la que genera, a la que gasta. Es el momento que el estado haga su parte con el sector empresarial no solo con las pequeñas y medianas empresas que apenas y sobreviven dándoles mayores condiciones, si no haciendo menos disparejo el escenario ante los tiburones hambrientos que tenemos y que dominan el escenario nacional controlando y monopolizando cada vez más el trabajo en México pero también más insertos en la toma de decisiones, así que cuidado clase política, no solo están cada vez más dominados por la clase económica, ahora ellos son quienes buscan tomar las decisiones por completo.
Por ultimo, quiero compartir algunos datos que extraje de algunos buscadores de trabajo por Internet portales como mx.indeed.com que es una red de publicidad de reclutamiento que ayuda a empresas de todos los tamaños a encontrar al candidato más adecuado para cada empleo. La plataforma actúa como fuente de postulantes para una gran cantidad de empresas y ayuda a encontrar millones de aspirantes adecuados para empleos en todos los campos -aclaro no es publicidad-, pero me sirvió como herramienta para encontrar datos interesantes respecto a las vacantes y la oferta que ofrecen.
Les dejo una tabla con sueldos base en algunas empresas en Sinaloa:
EMPRESA | SUELDO | ÁREA |
Agro industrias del norte | $11,196.00 | Auxiliar contable |
COPPEL | $4862.00 | Bodeguero/a |
Oxxo | $4327.00 | Empleado de piso |
Bodega Ahorrera | $4085.00 | Trabajador general |
Ley | $3479.00 | Empleado de piso |
Tai pak | $3200.00 | Agente telefónico |
Datos de https://mx.indeed.com/
Ahora contando con esta información, ¿Dónde te gustaría trabajar? ¿Cuánto merece tu trabajo?